Incredulidad en Globalia ante el reingreso de José Duato
El sector turístico emisor pata negra ha estado agitado este fin de semana. Desde hace días se viene hablando de una presumible reincorporación de José Duato a Globalia. En algunos círculos de Palma lo daban por hecho mientras que en Madrid no se lo acababan de creer. En la capital de Mallorca se decía que la vuelta de Duato se debatiría en casa de Hidalgo entre el viernes y el domingo.
Es más, en Palma se aseguraba que la propuesta del reingreso del consejero de Orizonia venía avalada por María José Hidalgo. ¿Un reingreso propuesto por la hija mayor del presidente de Globalia? Nadie se lo creía, ni en Madrid ni en Palma. “Es imposible porque María José y Pepe (Duato) no se pueden ver. Bueno, María José y el resto de los hijos, pero sobre todo María José”, aseveraba un amigo de la familia.
¿Cómo surge este rumor que ha tenido en vilo a más de un competidor, a gente cercana a la cúpula del primer grupo emisor y a un buen número de profesionales de alto nivel? Todo hace indicar que aparece cuando Duato le comunica a su equipo que definitivamente da carpetazo a los proyectos turísticos que tenía en marcha con Juan Torres, por un lado, y Jesús Pérez, por otro. Esto sí que no es una especulación.
Duato les había hecho saber quince días antes a Juan Torres que tenía dos semanas de plazo para cerrar alguna operación hotelera, que ese plazo era improrrogable, que tenía una oferta de un importante grupo que no podía rechazar y que “sería el broche de oro a mi carrera”. El exconsejero delegado de Orizonia les dijo también que va a salir indemne de las denuncias por la quiebra del grupo que gestionó.
Duato se niega a comentar el nombre del grupo. Y es entonces cuando empiezan las especulaciones. Barceló no puede ser, por razones más que obvias. En Springwater no es lo que nieguen, es que cuando se les cuestiona dicen que ellos se estaban haciendo la misma pregunta. ¿Con Javier Díaz, que no deja de crecer, entonces? Este pone cara de póker en el bar art decó del remozado hotel Eurobuilding.
Sólo queda, pues, una posibilidad, difícil pero no imposible: la vuelta a Globalia. ¿Pepe Hidalgo acogiendo de nuevo a Pepe Duato después de que éste lo dejara para irse a Orizonia y después de lo mal que acabaron por las supuestas trabas que el primero dice que le puso el segundo? Todo es posible en el mundo de los negocios.
Pero aunque business es business, en la sede de Llucmajor (Mallorca) los ejecutivos de Globalia lo desmentían categóricamente a sus colegas de otros grupos. En la sede de Pozuelo, por su parte, se decía lo mismo: “Esto es un cuento chino. Es un rumor malintencionado”, sentenciaban personas cercanas al presidente.
La incredulidad sobre el retorno de Duato a Globalia es plena entre los altos ejecutivos. Pero peores cosas se han visto. Hidalgo, quien se reincorporó el viernes al trabajo -una fuerza de la naturaleza, genio y figura hasta la sepultura- recibió un sinfín de llamadas a lo largo del día. Todas eran para interesarse por su estado de salud. ¿Hubo alguna pregunta sobre la reincorporación de Duato? Ah. Business is business.
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