Perfil de Alex Cruz: el español que pilotará el nuevo rumbo de British Airways
El directivo de 49 años será
nombrado en la primavera de 2016 nuevo presidente y consejero delegado de la
compañía.
Durante mucho tiempo, las dos
aficiones favoritas de Álex Cruz han sido hablar del Athletic de Bilbao y
seguir de cerca la estrategia de Michael O'Leary, el consejero delegado de
Ryanair, famoso por sus polémicas ideas para aumentar la rentabilidad de su
compañía.
A partir del año próximo, el
Athletic seguirá siendo parte de sus desvelos, pero Cruz podrá olvidarse de
Ryanair para centrarse en sus nuevos competidores, las grandes aerolíneas del
mundo como Air France, Lufthansa y Singapur Airlines.
El directivo de 49 años será
nombrado en la primavera de 2016 nuevo presidente y consejero delegado de
British Airways (BA), lo que le convierte en el español más influyente del
sector aéreo. El puesto llega tras diez años pilotando aerolíneas de bajo coste
-primero Clickair y después Vueling, ambas fusionadas en 2009-, y tras haber dedicado
toda su vida a lo que es su gran pasión, la industria aeronáutica.
El reto es enorme y los números
hablan por sí solos. Su ascenso le hará responsable del 65% de los ingresos de
IAG -el holding que agrupa a BA, Iberia y Vueling-, frente al 9% que supone
ahora la cuenta de resultados de la low cost. De gestionar una flota de 100
aviones con 20 millones de pasajeros al año en Europa, pasará a transportar 40
millones de pasajeros al año, con 282 aviones y rutas en los cinco continentes.
Sus retos al frente de British Airways serán mejorar su eficiencia e incorporar
más tecnología, como ha hecho en Vueling. "No es un kamikaze y no va a
llegar con una tijera dispuesto a recortar costes, como algunos piensan, pero
sí realizará mejoras", dice un ejecutivo del sector. Los analistas de
Nomura indican en su último informe sobre IAG que BA tiene un gran potencial
para mejorar sus márgenes. "El cambio en la gestión, que traerá al
consejero delegado de Vueling, debería mejorar la progresión de los márgenes",
asegura en informe.
El nombramiento de Cruz ha sido
una sorpresa, en parte, por el hecho de ser español, un detalle poco relevante
según el asesor Carlos Lareau, que ha trabajado con Cruz desde sus años en
Clickair. "Alex lleva casi toda su vida viviendo en Estados Unidos y Reino
Unido, lo que le hace un ejecutivo muy internacional. Bastaría con llamarle
Alex Cross, en lugar de Cruz, y nadie diría que es español", asegura.
Cruz nació en Bilbao, pero cuando
tenía 16 años su familia salió de España siguiendo a su padre, marino mercante,
que fue destinado a Panamá.
Estudió Ingeniería en la
Universidad Central de Michigan y pasó por Edwin Cox, la escuela de negocios de
Dallas. Trabajó una década como analista de American Airlines y fue socio de
Accenture, antes de fundar su propia consultora. El momento de pasar a la
gestión llegó cuando le ofrecieron pilotar Clickair, por entonces parte de
Iberia.
Sus colaboradores aseguran que
Cruz tiene una enorme capacidad de trabajo, que las pilla al vuelo y que
contagia su entusiasmo fácilmente a sus equipos, algo que le hará mucha falta
en BA, una empresa fundada en 1919 y con las inercias propias de una gran
corporación.
Otros aseguran que su pasión por
el detalle le lleva a controlar todo de forma intensa, lo que ha provocado la
marcha de varios ejecutivos de Vueling en los últimos meses. La compañía
todavía no ha anunciado quien será su sucesor.
Casado y padre de cuatro hijos,
ha pasado los últimos años a caballo entre Barcelona y Londres, donde vive su
familia. Dotado de gran sentido del humor y don de gentes, siempre está
dispuesto a colaborar con buenas causas. En Londres se ha labrado una
reputación como subastador en actos benéficos relacionados principalmente con
los colegios públicos a los que asisten sus hijos.
Si su proyecto al frente de BA
cumple con los objetivos marcados, el sector le coloca como sucesor del
irlandés Willie Walsh, consejero delegado de IAG y mentor de Cruz en su ascenso
en la corte británica.
Comentarios
Publicar un comentario