Irak cierra el tráfico aéreo internacional del Kurdistán en represalia por el referéndum
Desde este viernes los vuelos
internacionales no aterrizarán ni despegarán de los dos aeropuertos de la
región autónoma del Kurdistán iraquí. Bagdad propina así un severo golpe al
Gobierno kurdo y cumple con sus amenazas de estrechar el cerco sobre la región
en represalia por la celebración del plebiscito de independencia y la
aplastante victoria del "sí"."Hemos recibido una orden oficial
del primer ministro de Irak que nos pide que entreguemos el control de las
instalaciones", ha confirmado a EL MUNDO Talar Faiq, directora del
aeropuerto internacional de Erbil, la capital del Kurdistán iraquí.
"Se
han prohibido los vuelos internacionales desde y hacia el Kurdistán
iraquí", ha agregado la responsable desde su oficina en la primera planta
del nuevo aeropuerto, que abrió sus puertas en marzo de 2010.La medida entra en
vigor a las 18.00 hora local (17.00 hora española) de este viernes.
Según la
información proporcionada por el aeropuerto de Erbil, el último vuelo
internacional en despegar está operado por Austrian Airlines y tiene como
destino Viena. "Es una decisión errónea. Están golpeando a la economía y
al pueblo del Kurdistán pero también a la gran comunidad extranjera que hay en
estos momentos en Erbil, a las empresas internacionales radicadas aquí y a los
desplazados por el conflicto que usan nuestros aeropuertos para escapar y
reunirse con sus familiares", ha denunciado Faiq.
En los últimos días la
mayoría de las aerolíneas internacionales han ido anunciando la suspensión de
sus operaciones para cumplir con la orden del Gobierno central iraquí, que
controla el controla el espacio aéreo de todo el país a través de la autoridad
de Aviación Civil. Algunas compañías como la egipcia Egyptair han ofrecido a
sus pasajeros viajar desde el aeropuerto de Bagdad. Los vuelos nacionales entre
los aeropuertos del Kurdistán iraquí y el resto del país, operados por la local
Iraqi Airways, seguirán funcionando tras el inicio del veto. Las blindadas
instalaciones del aeropuerto de Bagdad ofrecerán las conexiones internacionales
a los residentes en el Kurdistán iraquí con la incomodidad de alargar su
periplo y el inconveniente de sobrecargar el tráfico aéreo de la capital.
Los
consulados extranjeros en Erbil han recomendado abandonar la región a aquellos
nacionales que solo cuenten con visado del Kurdistán iraquí.El aeropuerto de
Erbil también proporciona servicio a la aviación de la coalición internacional
liderada por Estados Unidos que bombardea posiciones del autodenominado Estado
Islámico en Siria e Irak. "Tampoco se verán afectadas las operaciones
militares y las humanitarias de la ONU", ha puntualizado Faiq.
Distracción
sobre la campaña contra el IS
Precisamente este jueves la coalición ha
reconocido que la consulta kurda ha distraído la atención sobre la campaña
castrense contra la organización yihadista. Su portavoz, el coronel Ryan Dillon,
admitió, sin embargo, que las operaciones continúan con normalidad en el
aeropuerto de Erbil. "El foco ahora no está al cien por cien allí",
ha apostillado tras negarse a hacer cábalas sobre el impacto venidero. "No
quiere predecir nada de lo que sucederá en el futuro pero en estos momentos la
operaciones prosiguen", ha precisado.
Los aeropuertos del Kurdistán iraquí
-ubicados en Erbil y la segunda ciudad de la región, Suleimaniya, próxima a la
frontera con Irán- reciben entre el 40 y 50 por ciento del tráfico aéreo
internacional de Irak. El Gobierno regional ha denunciado el "castigo
colectivo" y las agencias de viajes y turismo locales han denunciado que
la prohibición afecta a 400 compañías kurdas y podría causar la pérdida de
7.000 puestos de trabajo. "No sabemos cuánto durará la prohibición. Yo
confío en que se percaten de que es una decisión equivocada. No puede
prolongarse durante mucho tiempo", ha aseverado la directora del
aeropuerto de Erbil. En el plebiscito, celebrado el pasado lunes, el "sí"
a la independencia cosechó el 92,73% frente al 7,27% de los sufragios
negativos.
La participación alcanzó el 72,16% del censo en las provincias de la
región, las zonas fronterizas cuyo control se disputan históricamente Bagdad y
Erbil y la diáspora. Tras los resultados, divulgados a última hora del
miércoles, el primer ministro iraquí Haidar al Abadi advirtió de que impondrían
"la ley de Irak en todas zonas de la región con la fuerza de la
Constitución".Poco después, el Parlamento iraquí aprobó una batería de
doce medidas encaminadas a castigar la rebeldía de la región autónoma. Sus
señorías instaron a la comunidad internacional a la retirada de su
representación diplomática en Erbil y el cierre de las fronteras; suplicaron a
Al Abadi el despliegue de las tropas iraquíes en las áreas disputadas y
controladas por los peshmerga (el ejército "de facto" del Kurdistán
iraquí) y la adopción de todas las decisiones necesarias para hacer cumplir las
órdenes emitidas por los poderes ejecutivo, legislativo y judicial como la
destitución del gobernador de Kirkuk Najmaldin Karim; exigieron el
procesamiento de los organizadores del referéndum, entre ellos el presidente
regional, y el control de todas las explotaciones petroleras de Kirkuk.
Los
países vecinos Irán y Turquía, temerosos del impacto del plebiscito en sus
propias comunidades kurdas, también han amenazado con adoptar medidas que
podrían conducir a un bloqueo económico y el cierre de fronteras en una región
muy dependiente de la importación de alimentos y la exportación de petróleo a
través de un gasoducto que enlaza Kirkuk con Turquía. La ONU y Estados Unidos
se han ofrecido a mediar en la disputa que enfrenta a Bagdad y Erbil, dos
aliados clave de Washington en la batalla contra el IS.
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