Globalia desiste de comprar la aerolínea lusa TAP

Globalia, grupo propietario de Air Europa, ha desistido de comprar la aerolínea portuguesa TAP, que el Gobierno de Portugal quiere privatizar, según ha confirmado en Miami su presidente, Juan José Hidalgo.

   El Gobierno de Portugal puso a la venta el 66% de la aerolínea lusa TAP, que cerró 2014 con pérdidas de 46 millones, incluyendo sus negocios deficitarios en Brasil, en una operación que contempla reservar un 5% para los trabajadores y colocar el 61% restante a uno o más inversores de referencia.

   "Nosotros hemos desistido ya de esa idea, no se puede comprar una empresa con tanto endeudamiento que no puedas sanear y gestionar tú. No podemos invertir y quedarnos esposados de pies y manos. Al no poder manejarnos con criterios privados hemos desistido", ha asegurado Hidalgo en un encuentro con prensa especializada.

   El nuevo propietario de TAP no podrá recurrir al despido colectivo durante un período de 30 meses siguientes a la privatización de la compañía aérea, según lo pactado entre el Gobierno portugués y los nueve sindicatos más representativos. También negoció el mantenimiento de los acuerdos firmados por TAP y los sindicatos firmantes durante los próximos tres años.

   En 2012, el Gobierno luso aprobó el proceso de privatización de TAP, en dos fases mediante una ampliación de capital y la venta directa de las acciones representativas a uno o varios accionistas. Solo el grupo brasileño colombiano del empresario Germán Efromovich, Synergy Group, mostró interés por la aerolínea lusa pero su oferta, de unos 340 millones de euros, fue rechazada por los órganos gubernamentales del país.