Iberia, Vueling, Ryanair y Air Europa reavivan la batalla aérea este verano
La industria aérea española se
anima. La bonanza que vive el sector turístico ha contagiado a las aerolíneas
que, tras años de ajuste en su oferta y reestructuraciones internas, vuelven a
despuntar en 2014. Al crecimiento imparable de Vueling y la apuesta de Air
Europa por reforzarse en América Latina, se sumarán otros rivales como Iberia o
Ryanair, que habían optado por plegar velas en plena tormenta económica.
La renovada apuesta de las
grandes aerolíneas se explica, en parte, por el tirón del turismo extranjero
–las previsiones apuntan a un nuevo récord histórico, con más de 62 millones de
clientes internacionales en 2014– y por la incipiente recuperación de la
demanda española. La combinación de ambos factores ha permitido que el tráfico
aéreo acumule un alza del 1,8% en el primer trimestre y que el aeropuerto
Adolfo Suárez-Madrid Barajas haya vuelto a crecer tras tres años de caídas.
Más plazas
En Semana Santa, la progresión se
ha confirmado, con 7,7 millones de pasajeros (un 14,4% más que hace un año) y
la previsión es que la senda alcista continúe. En la temporada de verano (del
30 de marzo al 25 de octubre), la oferta de asientos se incrementará un 6,1%,
lo que supone más de tres millones de nuevos asientos, según Fernando
Echegaray, director de la red de Aena. En Madrid, donde el alza será del 7,7%,
la previsión de Aena es que 75 aerolíneas operen 297 rutas, de las que 43 serán
nuevas. Alemania, Brasil y Reino Unido serán los países más beneficiados.
Mientras, en Canarias y Baleares el aumento será del 9%.
Al margen de la recuperación de
la demanda, la decisión de las aerolíneas de recuperar destinos y aumentar
frecuencias responde a cuestiones estratégicas que varían en cada caso. La
ofensiva de Ryanair tiene como objetivo mantener el liderazgo en el mercado
español, amenazado por la progresión constante y de doble dígito de Vueling,
con la que también se disputa Italia y Bélgica. Por su parte, la low cost de
IAG está sometida a la presión de mantener su ritmo de crecimiento, para lo que
se ha lanzado a la conquista de Europa.
En el caso de Iberia, la
aerolínea dirigida por Luis Gallego se ha puesto manos a la obra para recuperar
su posición en América Latina, debilitada por el empuje de Air France-KLM, y
volver a convertir Madrid en la puerta de entrada a Latinoamérica desde Europa.
Para lograr este objetivo ha implicado a su filial de bajo coste Express –que
operará Ámsterdam y Estocolmo, destinos que en su día operó Iberia– y a su
franquiciada Air Nostrum, que ha pasado de 23 a 32 frecuencias semanales a
Valencia. En Alicante, aumenta hasta 26 el número de frecuencias, repartidas
entre Express y Air Nostrum, que también suma plazas este verano en Francia,
Italia y Portugal.
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