Fomento insiste en que el usuario deberá pagar para viajar en Rodalies a la T1 de El Prat
Mantiene el compromiso de que la estación intermodal de La Sagrera esté lista en 2019
El Ministerio de Fomento mantiene en su agenda de infraestructuras una obra reclamada fuertemente desde Cataluña, la llegada de Rodalies a la T1 del Aeropuerto de Barcelona-El Prat, una actuación para la que se baraja un modelo de colaboración público-privada y que el usuario pague un billete con un precio superior al habitual para llegar a las instalaciones aeroportuarias.
Así lo ha dicho este martes en un coloquio organizado por el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) y Barcelona Centro Logístico de Catalunya (BCL) el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda del Ministerio de Fomento, Rafael Catalá, que ha sido presentado ante un centenar de empresarios por el delegado especial del Estado en el CZFB, Jordi Cornet.
"Como los tiempos presupuestarios son los que son y la obra es cara, estudiamos modelos de colaboración público-privada con participación del usuario, tal y como pasa en las grandes capitales europeas como Londres", ha afirmado Catalá, que ha añadido que está trabajando con la Generalitat y con el Ayuntamiento de Barcelona para recuperar este proyecto.
Actualmente, los usuarios que viajen en Rodalies hasta el Aeropuerto de El Prat sólo pueden llegar a la T2 de las instalaciones, y allí coger un autobús gratuito para llegar a la T1, una solución que desde el Govern se considera poco competitiva y un agravio en comparación con la conexión intermodal que tiene el Aeropuerto de Madrid-Barajas.
Consciente de que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) son limitados, el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, propuso el verano pasado un tren lanzadera que enlazara el centro de la capital catalana con la T1 en 2017, una propuesta que arrancó el compromiso de la ministra de Fomento, Ana Pastor, pero de la que no se ha vuelto a hablar.
Con esta iniciativa, el Govern confiaba en que se pudieran desencallar los accesos ferroviarios que Fomento proyectó en 1998 y que se adjudicaron en 2010 con un presupuesto de 310,6 millones y un periodo de ejecución de cinco años, ya que el proyecto catalán tiene un coste de 217,4 millones, lo que supone un ahorro de 93,2 millones, y un plazo de ejecución más competitivo, al tener una duración de cuatro años.
LA SAGRERA.
En cuanto a la futura estación intermodal de La Sagrera, Catalá ha mantenido el compromiso del Gobierno de tenerla lista en 2019 tras el rediseño que se hizo de la infraestructura y que supondrá que el proyecto tendrá un coste máximo de 650 millones de euros e implicará la participación de un inversor privado.
"Ahora es una obra realista tras la reordenación de la inversión--inicialmente se estimaron 800 millones--, y no se edificará donde no hay demanda", ha asegurado Catalá, que ha añadido que la infraestructura ha captado el interés de inversores para superficies comerciales y de oficinas cuidando el entorno.
CORREDOR MEDITERRÁNEO.
Después de trascender que el PP incluye en su programa electoral para los comicios europeos el Corredor Central, y preguntado si para el Gobierno esta infraestructura es más importante que el Corredor Mediterráneo, Catalá ha evitado responder y ha aseverado que el Corredor Mediterráneo, en el que este año se han invertido más de 570 millones, entrará en funcionamiento en 2015.
Asimismo, ha lanzado un mensaje de tranquilidad a los emprearios y ha confirmado que el tramo entre Castellón y Vandellós incorporará tanto el ancho ibérico como el internacional para que el "proceso de transición sea abordable para los operadores".
CRÍTICA A ADIF Y RENFE.
Ha destacado la importancia de que el Corredor Mediterráneo sea un eje para pasajeros y mercancías, un tráfico ferroviario que quiere potenciar puesto que el 96% de las mercancías se mueve por carretera, siendo éste un desequilibrio importante en comparación con otros países europeos.
"Algo habremos hecho mal. Renfe no ha sido un buen operador de mercancías, y Adif no ha sido un buen gestor de plataformas logísticas. Estamos trabajando en ello", ha sostenido, y ha añadido que Adif es deficitario y que está trabajando para reducir los costes de sus servicios en las terminales logísticas.
Así lo ha dicho este martes en un coloquio organizado por el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) y Barcelona Centro Logístico de Catalunya (BCL) el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda del Ministerio de Fomento, Rafael Catalá, que ha sido presentado ante un centenar de empresarios por el delegado especial del Estado en el CZFB, Jordi Cornet.
"Como los tiempos presupuestarios son los que son y la obra es cara, estudiamos modelos de colaboración público-privada con participación del usuario, tal y como pasa en las grandes capitales europeas como Londres", ha afirmado Catalá, que ha añadido que está trabajando con la Generalitat y con el Ayuntamiento de Barcelona para recuperar este proyecto.
Actualmente, los usuarios que viajen en Rodalies hasta el Aeropuerto de El Prat sólo pueden llegar a la T2 de las instalaciones, y allí coger un autobús gratuito para llegar a la T1, una solución que desde el Govern se considera poco competitiva y un agravio en comparación con la conexión intermodal que tiene el Aeropuerto de Madrid-Barajas.
Consciente de que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) son limitados, el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, propuso el verano pasado un tren lanzadera que enlazara el centro de la capital catalana con la T1 en 2017, una propuesta que arrancó el compromiso de la ministra de Fomento, Ana Pastor, pero de la que no se ha vuelto a hablar.
Con esta iniciativa, el Govern confiaba en que se pudieran desencallar los accesos ferroviarios que Fomento proyectó en 1998 y que se adjudicaron en 2010 con un presupuesto de 310,6 millones y un periodo de ejecución de cinco años, ya que el proyecto catalán tiene un coste de 217,4 millones, lo que supone un ahorro de 93,2 millones, y un plazo de ejecución más competitivo, al tener una duración de cuatro años.
LA SAGRERA.
En cuanto a la futura estación intermodal de La Sagrera, Catalá ha mantenido el compromiso del Gobierno de tenerla lista en 2019 tras el rediseño que se hizo de la infraestructura y que supondrá que el proyecto tendrá un coste máximo de 650 millones de euros e implicará la participación de un inversor privado.
"Ahora es una obra realista tras la reordenación de la inversión--inicialmente se estimaron 800 millones--, y no se edificará donde no hay demanda", ha asegurado Catalá, que ha añadido que la infraestructura ha captado el interés de inversores para superficies comerciales y de oficinas cuidando el entorno.
CORREDOR MEDITERRÁNEO.
Después de trascender que el PP incluye en su programa electoral para los comicios europeos el Corredor Central, y preguntado si para el Gobierno esta infraestructura es más importante que el Corredor Mediterráneo, Catalá ha evitado responder y ha aseverado que el Corredor Mediterráneo, en el que este año se han invertido más de 570 millones, entrará en funcionamiento en 2015.
Asimismo, ha lanzado un mensaje de tranquilidad a los emprearios y ha confirmado que el tramo entre Castellón y Vandellós incorporará tanto el ancho ibérico como el internacional para que el "proceso de transición sea abordable para los operadores".
CRÍTICA A ADIF Y RENFE.
Ha destacado la importancia de que el Corredor Mediterráneo sea un eje para pasajeros y mercancías, un tráfico ferroviario que quiere potenciar puesto que el 96% de las mercancías se mueve por carretera, siendo éste un desequilibrio importante en comparación con otros países europeos.
"Algo habremos hecho mal. Renfe no ha sido un buen operador de mercancías, y Adif no ha sido un buen gestor de plataformas logísticas. Estamos trabajando en ello", ha sostenido, y ha añadido que Adif es deficitario y que está trabajando para reducir los costes de sus servicios en las terminales logísticas.
Comentarios
Publicar un comentario