Huelga en Iberia: cancelados 239 vuelos en el último día de la primera semana de paro
Un total de 239 vuelos no despegará
hoy por la huelga en Iberia convocada por los sindicatos en contra del plan de
ajuste, de los que 85 han sido cancelados por la propia compañía, 18 por su
filial Iberia Express, 60 por su línea regional Air Nostrum y 76 por su
participada Vueling.
Se trata de la quinta y última
jornada de la primera semana de una huelga de quince días que continuará el mes
que viene en dos tandas, del 4 al 8 y del 18 al 22 de marzo.
En total, de lunes a viernes, se
han cancelado más de 1.220 vuelos entre Iberia, Iberia Express, Air Nostrum y
Vueling, aunque se ha logrado dar una solución a todos los pasajeros afectados,
que en caso de Iberia suman un total de 71.000.
La jornada de hoy va acompañada,
tal y como sucedió en el inicio de la huelga el lunes pasado, de una concentración
en la T4 del aeropuerto de Madrid-Barajas que se llevará a cabo entre las 12.00
y las 15.00 horas.
El pasado lunes, se concentraron
en la terminal madrileña unos 8.000 trabajadores de la compañía y también fue
masiva la manifestación celebrada el miércoles ante la seda de Iberia que
reunió a más de 4.000 personas.
Ante la falta de avances en la
negociación entre los sindicatos e Iberia durante esta primera semana de paros,
ambas partes han aceptado, a propuesta del Ministerio de Fomento, la mediación
del catedrático de Derecho del Trabajo Gregorio Tutela.
La mediación, sin embargo, no
interrumpe el proceso negociador del expediente de regulación de empleo (ERE)
que afectará a 3.807 trabajadores y que empezaría a aplicarse a partir del 14
de marzo.
Los sindicatos han añadido que el
proceso de mediación tampoco supone la desconvocatoria de las huelgas previstas
en marzo, ni el resto de las movilizaciones, mientras que Iberia ha señalado
que "ojalá" salga de ahí la solución al conflicto y también para la
viabilidad futura de la compañía.
Las diez claves para entender el
conflicto de Iberia
Los sindicatos de tierra y tripulantes
de cabina (UGT, CC.OO., USO, Sitcpla, Asetma y CTA-Vuelo) de Iberia han
convocado 15 días de huelga en protesta por el Plan de Reestructuración que
contempla la reducción de 3.807 empleos y lo que sus trabajadores denominan el
“desmantelamiento de la compañía”. Estas son las claves para comprender este
conflicto.
1. Crisis estructural
En el sector aéreo hay dos tipos
de compañías: de red y low cost. En los últimos diez años las compañías de bajo
coste se han hecho con el 56% del tráfico aéreo dentro de Europa. Esto se ha
traducido en una rebaja del 45% en los ingresos por pasajero y kilómetro
(Yield) en las compañías de red. Además, se ha producido una fuerte subida del
combustible, que representa ya el 34% de sus costes. La Asociación de
Aerolíneas Europeas (AEA) estima que las pérdidas acumuladas por todas las
compañías en 2012 se elevarán a 1.300 millones de euros. Más allá de la crisis,
esta situación ha obligado a reestructurar las compañías tradicionales. KLM-Air
France y Lufthansa han derivado parte de su negocio doméstico a sus low cost
(Transavia y Germanwings), igual que Iberia ha hecho con Vueling e Iberia
Express. British solo hace ya siete rutas en Reino Unido desde Londres y ha
centrado su negocio en los vuelos intercontinentales. En España han quebrado
Air Madrid, Air Plus Comet y Spanair; y Air Europa, Air Nostrum y Binter Canarias
han presentado ERE´s y otras medidas de ajuste.
2. Negocio inviable
La situación de partida de Iberia
para afrontar este cambio era una compañía inviable, como explica su
presidente, Antonio Vázquez. Lleva cinco años con pérdidas operativas que superan
los 900 millones de euros. Sólo en los nueve primeros meses de 2012 ha perdido cerca de un
millón al día. El 40% de su negocio depende de España, donde le han ganado la
partida las “low cost” y las grandes rutas sus costes son entre un 20 y un 30%
mayores que sus competidores. De casi 80 rutas operadas, solo diez son
rentables. En el largo radio hay ocho rutas que generan beneficio, sobre un
total de 24, mientras que en los vuelos domésticos y europeos solo dos de más
de 50 ganan dinero. El resto de la actividad aérea de la aerolínea es
deficitaria
3. Problemas acumulados durante años
Los problemas acumulados en
Iberia al margen de la crisis económica son básicamente cuatro: la subida del
combustible, cuyo precio oscila entre 98 y 125 dólares desde 2011 y representa
ya el 30% de sus costes; El aumento de las tasas aeroportuarias un 27% en dos
años; El desarrollo del AVE (en un año han descendido en un millón los
pasajeros en los aeropuertos) y las “low cost” que se han comido su mercado
doméstico, las compañías de bajo coste ya controlan el 58% del tráfico
internacional con España; Y por último, tiene una estructura de costes
laborales muy superiores a los de sus competidores.
4. Plan de Reestructuración
El pasado mes de noviembre la
dirección de Iberia presentó un plan de reestructuración en tres años que
contempla la reducción de la plantilla en un 19%, lo que supone 3.807
trabajadores menos, la eliminación del 25% de su flota, la reducción de un 15%
de su actividad y prescindir de los negocios no rentables (mantenimiento de
aeronaves y handling). El objetivo es ganar 300 millones en 2015 e invertir
2.000 millones para cambiar su imagen y captar clientes de business, que son
los que más pagan y dejan mayor margen por billete. Los sindicatos han presentado
una alternativa, cuya la diferencia fundamental con el Plan de la compañía es
que contemplan solo un año de ajuste y después un incremento de la actividad a
partir del 2014, por eso el ajuste tiene que ser más suave. La dirección cree
que el problema no es coyuntural y por eso no se va a arreglar cuando se supere
la crisis económica. Consideran que es un problema estructural que requiere un
cambio de modelo para adptarse a un mercado que ha cambiado. Sin embargo, los
sindicatos creen es una estratagema para “desmantelar Iberia”. Y entregar el
negocio a BA.
5. Ajuste laboral
Tras casi dos meses de
negociación el acuerdo entre la empresa y los trabajadores ha sido imposible.
La compañía ha decidido endurecer su plan inicial y aplicar la reforma laboral
y la reducción de empleo (3.807 trabajadores menos) se harán con despidos de 20
días por año trabajado con un año máximo de indemnización. Los sindicatos en su
alternativa plantean 2.600 despidos. El lunes se inicia una negociación para
ultimar las condiciones del ajuste. La compañía quiere ejecutarlo en la
temporada de verano que comienza en marzo.
6. Salarios poco competitivos
La compañía considera que los
costes laborales son superiores a los de sus competidores. En diez años el
aumento salarial ha sido alrededor del 50%. En el colectivo de pilotos (que
además trabajan un 23% menos que sus competidores) y en el de los trabajadores
de tierra ha sido del 34%, mientras que en el de tripulantes de cabina de
pasajeros (TCP) ha sido del 26%. Los costes medios de los colectivos de TCP y
de pilotos de Iberia son de 74.000 € y 200.000 €, respectivamente, cifras que
son muy superiores a los de la competencia. En el caso de los pilotos de corto
y medio radio, en 2011 el coste de empresa medio de Vueling e Iberia Express
(2012) era alrededor de un 50% inferior. En el caso de los TCP la diferencia
entre ambas es del 60%. Tiene cerca de 8.000 trabajadores trabajando en
mantenimiento y handling y estos últimos tienen unos costes un 44% superiores a
los de sus competidores. La compañía plantea una rebaja salarial del 20% de
media a sus 20.000 trabajadores. Los sindicatos en su alternativa plantean la
congelación salarial y una rebaja del 10%.
7. Fusión Iberia-British Airways
Iberia fue privatizada en 2001.
La colaboración comercial entre Iberia y British (BA) comenzó en 1998. Diez
años después iniciaron negociaciones que culminaron en su fusión el 24 de enero
de 2011 y crearon uno de los grupos aéreos más fuertes de la aviación comercial
mundial, sexto del mundo y tercero europeo. Fue una fusión paritaria en sus
órganos de Gobierno, que fue posible gracias a la fuerte caída bursátil que
había experimentado British por los problemas con su fondo de pensiones. Sin
embargo la compañía británica duplicaba con creces a la española y
quintuplicaba sus bneficios. Desde 1996 hasta 2010, es decir, hasta un año
antes de la fusión, BA consiguió unos beneficios de 6.800 millones de euros,
mientras que los beneficios de Iberia en ese mismo periodo sumaron 1.454
millones de euros.
8. Fondo de pensiones
Los pilotos de Iberia argumentan
que detrás del ajuste se esconde el afán de British de desmantelar Iberia para
quedarse con su negocio, su dinero y resolver el “agujero” de su fondo de
pensiones. Según un estudio elaborado por la consultora Aldecoa, "British
Airways oculta desde el pasado mes de marzo el incremento del déficit de sus
pensiones y no aplica la nueva norma contable que derivaría en tener que
declarar pérdidas para justificar la imposición de un plan brutal para Iberia".
Tal como afirman, "la nueva norma contable que entró en vigor a partir del
año 2012 en Reino Unido, parecida a la española, obliga a que la cuenta de
resultados de BA, y por lo tanto de IAG, refleje, cosa que curiosamente no han
hecho, un impacto de 2.100 millones de libras por los déficits de pensiones de
BA". La dirección de Iberia ha negado rotundamente esta situación. Tal
como argumenta es un fondo de pensiones de prestación definida. La evolución
bursátil ha provocado unas minusvalías que hay que dotar en 30 años. No
obstante, la ley afirma taxativamente que estas dotaciones en ningún caso
pueden poner en riesgo la viabilidad de la empresa. Tal como explica la empresa
esta circunstancia estaba castigando la cotización de BA en el 2009 y fue la
que permitió sacar adelante una "fusión entre iguales" con Iberia.
Pero la situación ha quedado superada, las aportaciones pautadas, y según
afirman fuentes de la dirección, el flujo tiene ahora superávit. Lo que
significa que el planteamiento del Sepla no ajusta a la realidad actual del
fondo de pensiones.
9. La importancia de Iberia
El conflicto de Iberia ha
provocado la intervención del Ministerio de Fomento hace un año, que forzó un
laudo arbitral con los pilotos a causa de la creación de Iberia Express. Esto
retrasó el ajuste de la compañía. Ahora ha sido el Congreso de los Diputados el
que ha pedido al Gobierno que intervenga para garantizar la conectividad
nacional e internacional de los vuelos desde España. Sin embargo, la compañía
argumenta que estas conexiones están garantizadas por otras compañías, y si
quieren que se mantengan tendrán que subvencionarlas. En 2012 volaba a 100
destinos en 40 países y en 2014 volará a 94 destinos en 37 países. En
Latinoamérica quita 4 destinos: La Habana, dominado en un tercio por Air
Europa; Santo Domingo, donde Air Europa tiene dos tercios del mercado; San
Juan, que operará desde Miami y Montevideo, donde era el único operador
europeo. También elimina Estambul, Atenas y El Cairo. Todos ellos eran destinos
turísticos para los españoles y el tráfico se ha reducido entre un 25 y un 42%.
En estas rutas perdía 95 millones.
10. Efecto de los paros
Las compañías del grupo Iberia
cancelarán un total de 415 vuelos, el 39% de los 1.062 vuelos programados, ya
que 647 están protegidos por los servicios mínimos decretados por el Ministerio
de Fomento. Operarán el 90% de los vuelos de largo radio, el 61% en el medio
radio internacional y el 46% en las rutas nacionales. La huelga afectará
también a las compañías Vueling, Air Nostrum e Iberia Express, que se han visto
obligadas a anular más de 800 vuelos, dado que no contarán con el servicio de
asistencia en tierra que Iberia Airport Services les presta.
Iberia Express, ha cancelado un
total de 96 vuelos la próxima semana. Air Nostrum cancelará de 357 operaciones.
Vueling 354 vuelos, el 29% de los programados en esas fechas por la aerolínea
catalana. Operarán el 100% de los vuelos con Canarias y Baleares, entre islas
en ambos archipiélagos y entre las ciudades peninsulares y Melilla. Además, del
50% de los vuelos al extranjero.
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