Iberia, Air Europa, Vueling y Air Nostrum mejoran por petróleo, tráfico y menores tasas
Las tarifas aéreas sin incluir los impuestos
y recargos disminuyen un 5,1% en 2014
De un imparable y casi eterno descenso del
tráfico, un petróleo por encima de 100 dólares y tasas públicas por uso de los
aeropuertos al alza, hemos pasado a un contexto completamente distinto y
favorable. En poco más de 13 meses las líneas aéreas españolas han
experimentado un vuelco absoluto en la rentabilidad de su negocio y en sus
perspectivas a medio plazo. El crudo no parece conocer suelo y se desploma casi
el 50% dese los máximos de hace cinco o seis años y más del 30% desde poco
antes del verano.
El trasiego de viajeros en la red
española de aeropuertos registra ya 13 meses consecutivos de
crecimiento lo cual le permite abandonar el fondo del pozo en que se
hallaba sumida.
En paralelo, el pasado veranos Aena
aceptó congelar las tasas durante los próximos diez años y puso en marcha
bonificaciones en ciertos supuestos de crecimiento en rutas. "Las
tarifas no subirán nunca", afirmaba Fomento, que vinculaba la
medida con la necesidad de hacer los aeropuertos más competitivos y más
atractivos para las aerolíneas, con el objetivo de promover el turismo.
"Desde ahora se congelan las tarifas en España, los aeropuertos
españoles van a ser más competitivos".
La confluencia de estos factores, que se
pueden ver estimulados por la bajada de impuestos que entra en vigor en
enero, ha provocado que las cuentas de resultados de las operadoras
españolas hayan cambiado de aspecto de forma sustancial y de manera aún
más apreciable lo hará en 2015.
El cambio de cara del sector es global por
supuesto, pero en España se daba una confluencia de varios factores
negativos de gran calado que ahora se van disipando. A escala mundial,
la bajada del petróleo y la reactivación del tráfico han disparado las
estimaciones de beneficio sectorial, sobre todo en 2015.
Las aerolíneas cerrarán el año próximo
con 25.000 millones de dólares (20.205 millones de euros) de beneficios
en 2015, un 25,6% más que el resultado estimado para 2014, que alcanzará
los 19.900 millones de dólares (16.067 millones de euros), según la
Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA).
La IATA, que aglutina el 90% del tráfico
aéreo mundial, incrementa así en un 10% sus estimaciones realizadas en
junio cuando cifró en 18.000 millones de dólares (14.534 millones de euros)
las ganancias del sector para este año. En 2013, las compañías aéreas
lograron un beneficio neto de 10.600 millones de dólares (8.561 millones
de euros).
La IATA espera que las tarifas aéreas (sin
incluir los impuestos y recargos) disminuyan un 5,1% en 2014 y que los
niveles de las tarifas de carga retrocedan un 5,8%. Esto supone un
beneficio neto de 7,08 dólares por pasajero en 2015 y de 6,02 dólares en
2014, frente a los 3,38 dólares de ingresos por pasajero en 2013.
El grupo IAG, que agrupa a Iberia y Vueling
junto a BA, ha recogido este cambio de escenario en la cotización de la
acción, que desde el verano vive un rallie notable, al igual que sus
competidores cotizados. Air Europa, con planes de salir a bolsa, se puede
beneficiar de una mejor valoración y Volotea está retomando sus planes
de expansión.
Una mejora adicional de estas previsiones
de beneficios dependerá claro está de si los precios del petróleo se
mantienen por debajo de los 70 dólares el barril. Los expertos prevén que
el coste medio se sitúe en 2015 en torno a los 85 dólares el barril de Brent.
Si estos precios se mantienen sería la primera vez que el precio medio del
petróleo cae por debajo de los 100 dólares desde 2010 (79,4
dólares/barril Brent).
Tráfico pujante
En España, los aeropuertos registraron
durante los once primeros meses del año 183 millones de pasajeros, un 4,5
% más respecto al mismo período de 2013. En noviembre, por los
aeropuertos de Aena pasaron 13 millones de pasajeros -de los que 8 millones
fueron internacionales-, un 3,2 % más que durante el mismo período del
año pasado, a pesar de no ser uno de los mejores meses de año en cuanto al
tráfico aéreo. Los aeropuertos registraron más de 1,71 millones de
operaciones y la carga transportada ha experimentado un crecimiento
de 4,8 %, hasta las 626.000 toneladas.
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