El «vía crucis» del aeropuerto de Castellón acabará en la Semana Santa de 2015

Los responsables de la infraestructura esperan que los primeros vuelos comerciales lleguen cuatro años después de su inauguración

 

 

Imagen de la terminal del aeropuerto de Castellón

El aeropuerto de Castellón encara lo que parece, ahora si, la cuenta atrás para el inicio de sus operaciones. Inagurado en marzo de 2011, el recinto todavía no ha albergado más vuelos que los de pruebas. Sin embargo, existe una fecha marcada en rojo en el calendario. El próximo 11 de diciembre se espera que el aeropuerto reciba la certificación definitiva del Ministerio de Fomento, una vez superados todos los trámites administrativos.

Si se cumplen las previsiones, a partir de ese día el aeródromo castellonense ya tendrá el visto bueno de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea para recibir vuelos. Sin embargo, la apertura comercial y la llegada de los primeros vuelos regulares tendrá que esperar, probablemente a marzo. Con todo, sus responsables no descartan que pueda llegar antes algún avión, aunque fuera de forma simbólica.

Así, el presidente de Aerocas (la sociedad pública propietaria del aeropuerto, José Císcar, ha explicado se está «más cerca que nunca» de la apertura del recinto, tanto que se está trabajando ya con todos los vuelos comerciales que llegarán a esta infraestructura en la temporada primavera-verano.

Aerocas trabaja con Lavalin, la multinacional canadiense adjudicataria de la gestión de la infraestructura, en la fase posterior a la de la obtención del gestor aeroportuario y la autorización de apertura. El gran reto pasa por lograr que el aeropuerto esté plenamente operativo en la campaña de Semana Santa de 2015.

El contrato de adjudicación estipulaba que los primeros vuelos deberían haber aterrizado a partir del 26 de octubre, pero los retrasos en las certificaciones justifican la demora.

Ahora, los responsables del recinto ya planifican de forma «seria y rigurosa» la llegada de vuelos regulares de compañías de bajo coste, así como la posibilidad de albergar vuelos chárter.