INFORMACIÓN PRÁCTICA: ¿POR QUÉ HAY QUE SUBIR LAS PERSIANAS DE LAS VENTANILLAS AL DESPEGAR?

 

Al despegar o aterrizar una aeronave, es una práctica común subir las persianas de las ventanas . Esta medida se toma por razones de seguridad y comodidad de los pasajeros .




Desde una perspectiva de seguridad, es esencial que las persianas estén levantadas para permitir una mejor visibilidad fuera del avión. En caso de emergencia, los miembros de la tripulación y los pasajeros deben poder observar rápidamente el entorno externo para detectar cualquier problema potencial, como un incendio, una fuga de combustible o cualquier otra situación de emergencia. Esta vista exterior es crucial para tomar las decisiones correctas en términos de evacuación o comunicación con la torre de control.

Además, subir las persianas ayuda a mantener el contacto visual con el exterior, lo que puede reducir la sensación de desorientación o ansiedad de algunos pasajeros, especialmente durante las fases críticas del vuelo, como el despegue. Esto puede ser tranquilizador para las personas con miedo a volar o volar.

Además, durante la fase de despegue, las persianas abiertas permiten la entrada de luz natural a la cabina, evitando así la oscuridad total. Esto puede ser beneficioso para la adaptación del cuerpo a los cambios de altitud y presión, lo que puede ayudar a prevenir el mal de altura o el efecto de “tapado de oídos” que experimentan algunos pasajeros.

Finalmente, cuando un avión despega, la presión externa disminuye a medida que gana altura. Los aviones modernos están diseñados para mantener una presión de aire cómoda dentro de la cabina, similar a la que se encuentra a una altitud de alrededor de 2500 metros (8000 pies). Sin embargo, algunas personas pueden experimentar una sensación de presión en los oídos durante el despegue. Al mantener las persianas levantadas, los pasajeros tienen la oportunidad de mirar hacia afuera y observar el cambio de altitud, lo que puede ayudar a aliviar esta sensación al permitirles orientarse visualmente al movimiento de la aeronave.

En conclusión, subir las persianas de las ventanas durante el despegue es fundamental por motivos de seguridad y comodidad de los pasajeros. Esto proporciona una vista exterior en caso de emergencia, tranquiliza a las personas ansiosas, ayuda al cuerpo a adaptarse a los cambios de altitud y proporciona una visión visual del movimiento de la aeronave para aliviar la sensación de presión en los oídos. Se trata, por tanto, de una medida sencilla pero significativa que contribuye a mejorar la experiencia de vuelo de todos los pasajeros a bordo.


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