Walsh lanza un aviso: “Si tengo que desafiar a los sindicatos, así será”

El consejero delegado de IAG, Willie Walsh, no tiene intención de dar marcha atrás en sus planes de adelgazar Iberia y lo hará aunque se tenga que enfrentar de nuevo al sindicato de pilotos, el único que no ha aceptado la reestructuración ideada por el holding británico para la compañía y que no está dispuesto a negociar nuevas medidas para mejorar la productividad.

Durante el Congreso Mundial de las Aerolíneas de Bajo Coste, que se celebra en Londres, Walsh ha sido tajante: “No estoy en el cargo para divertirme”. Y ha añadido: “Si eso significa que debo desafiar a los sindicatos nuevamente, entonces así será. Es mi trabajo”.

De esta forma el consejero delegado de IAG avisa de que dará la batalla por Iberia y no rehuirá un enfrentamiento directo con el colectivo de pilotos, pues está convencido de que las medidas que incluye el plan de reestructuración son imprescindibles para asegurar la viabilidad de la compañía y evitar que desaparezca.

Dicho programa de ajustes conlleva el despido de 3.141 trabajadores, además de recortes salariales del 14 por ciento de media. La dirección del holding británico tiene prisa por acometer su plan y conseguir así ir limar las pérdidas de la socia española de British Airways, que según dijo Walsh en junio estaba en una situación “crítica”.

El consejero delegado de IAG insistió entonces durante la junta de accionistas que es necesario el trabajo conjunto de todas las partes implicadas lograr la transformación de Iberia, cuya renovación de flota está paralizada hasta que “no sea rentable, tenga una estructura de costes sostenible, e impulse sus ingresos”.