IAG, nuevo objetivo es Prat de una limitada con Iberia

“No planeamos ningún alejamiento de Barajas”, aseguran desde la sede de IAG en Londres

Iberia tiene reestructuración para rato, amén de unos convenios colectivos particulares que pueden limitar algunas pretensiones empresariales. IAG ha empezado a atar los lazos de una nueva golosina en España, la low cost Vueling, de la que en breve controlará el 90% tras recibir el apoyo de la mayoría de los accionistas a su OPA. Pero Vueling no llega sola. A ella va aparejada la posibilidad de crecer en uno de los aeropuertos más pujantes de Europa, el de Barcelona El Prat, que el año pasado superó por primera vez los 35 millones de pasajeros tras crecer un 2’2%. En el mismo ejercicio, el aeropuerto de Madrid Barajas cayó un 9%.

En las declaraciones institucionales de la cúpula de IAG este martes, el consorcio ha dejado clara la importancia de “la fuerte base en Barcelona” de su futuro socio. De hecho, Vueling controla el 30% del mercado en este destino y su cuota dominante es uno de los atractivos que ha animado al holding formado por British Airways e Iberia a lanzarse a por la compañía presidida por Josep Piqué. La low cost también es líder en los aeródromos de Bilbao, Menorca y Granada.

Preferente.com requirió hace unos días la postura oficial de la dirección de IAG respecto a su estrategia futura en Madrid y en Barcelona. En este sentido, las fuentes contactadas han manifestado que “no planeamos ningún alejamiento de Barajas. Si Vueling se integra en IAG, ambos aeropuertos serán importantes para IAG”. “Vueling será un negocio independiente en IAG y todos los aeropuertos de referencia de nuestras aerolíneas son importantes para nuestro negocio”, han añadido.

No obstante, fuentes del sector consultadas por este digital ven probable que IAG frene temporalmente cualquier pretensión de crecimiento en el hub de Iberia, el aeropuerto de Madrid Barajas, y que centre sus esfuerzos en El Prat, donde Vueling podría asumir nuevas rutas de corto y medio radio operadas hasta la fecha por la antaño compañía de bandera de España. La visión no es del todo descabellada, pues la aerolínea de bajo coste ya ha superado a Iberia en número de pasajeros en el primer trimestre de 2013 y se ha convertido en la primera compañía española.

De hecho, en enero de este año el diario Financial Times publicó que International Airlines Group pretende ceder a Vueling parte de las rutas europeas que operan a día de hoy  Iberia y British. Aún así, desde Londres han insistido, entonces y ahora, en que Vueling se mantendrá independiente. “Planeamos mantener el actual modelo de negocios de Vueling y su estructura de gestión”, aseguraba este martes el CEO de IAG, Willie Walsh. Pero Piqué añadía que la integración en la estructura del holding hispano-británico, al mismo nivel que las otras dos empresas, “ofrece importantes oportunidades estratégicas de crecimiento y desarrollo futuros”.

En el posible viraje de la estrategia a corto o medio plazo de IAG en España hay dos factores a tener en cuenta. Uno es de orden laboral y otro económico. El primero viene determinado por el hecho de que el anexo 10 del convenio colectivo de los pilotos de Iberia limita mucho la posible actividad de Vueling en Barajas en código compartido con su socia, dueña ya del 45’85% de la aerolínea con base en Barcelona. Si IAG pisa esta raya roja, se asegurará el conflicto con el beligerante sindicato Sepla, que ‘blindó’ el aeropuerto de Madrid para la compañía nacional.

Por otra parte están los costes. Tanto los propios de la operación, que resultan más eficientes con Vueling, como los derivados de las tasas y tarifas de Aena. En este punto cabe señalar que varias low cost extranjeras que operan en El Prat, como EasyJet y Ryanair, han señalado que el aeropuerto catalán les resulta más rentable porque sus tasas por pasajero son cerca de un euro inferiores a las de Madrid.

Hay quien opina que el Gobierno debería pronunciarse si IAG opta por crecer en Barcelona de la mano de Vueling y abandona paulatinamente el aeropuerto de Barajas, que supuso una inversión milmillonaria y tiene a Iberia como su principal usuario. Sin embargo, Fomento ha declinado hacer ningún comentario al respecto.

IAG ha conseguido el visto bueno de la mayoría de los accionistas de Vueling, que han respaldado de forma mayoritaria la oferta mejorada del holding británico para hacerse con el control de la aerolínea al precio de 9,25 euros por título.

En un comunicado remitido a la CNMV, Vueling detalla que la oferta pública de adquisición formulada por VeloZ Holdco, S.L.U., filial de IAG, ha sido aceptada por un número de 13.355.675 acciones, lo que representa un 82,48 por ciento de los títulos a los que dirigió la oferta y un 44,66 por ciento del capital social de la aerolínea.

Este porcentaje se suma al 45,85 por ciento de las acciones que IAG ya controlaba a través de Iberia por lo que, en total, el holding británico cuenta con más del 90 por ciento del capital social de Vueling tras la OPA.

“En consecuencia, la oferta pública ha tenido un resultado positivo, al haber sido el número de acciones comprendidas en las declaraciones de aceptación superior al límite fijado por IAG, 1,24 millones de acciones, representativas del 4,16% del capital social de la catalana”, destaca la nota remitida a la CNMV.

Tras conocerse la decisión de la mayoría de accionistas de Vueling, el presidente de la compañía, Josep Piqué, ha reiterado que la integración en la estructura de IAG “ofrece importantes oportunidades estratégicas de crecimiento y desarrollo futuros”.

“Estoy convencido de que Vueling mantendrá el dinamismo, el espíritu innovador y la competitividad que son la base de su éxito. Esos atributos, junto a una reforzada presencia en el grupo IAG, nos permitirán en esta nueva etapa que sigamos creciendo y consolidándonos como un referente único en la aviación comercial europea”, ha destacado.